Metodología

El éxito del diseño estratégico  integra un amplio análisis y la creatividad.
Las herramientas de investigación, la idea y el diseño, se complementan para su aplicación a nivel corporativo, para ayudar a los clientes re-imaginar no sólo sus productos, sino su lugar en el mercado. 


El proceso comienza con una base de investigación en una fase de análisis, durante el cual se examina la estructura empresarial, entorno de mercado, y la base de consumidores y clientes. 
Posterior a esto, se identifican las principales vías para innovar y prever sistemáticamente la exploración de nuevos conceptos de los modelos de negocio, productos y servicios.

Una vez que los caminos prometedores son identificados, se llevan los conceptos a la realidad, ayudando a los clientes a adoptar estos cambios con la ejecución de estrategias de orientación y asesoría durante todo el proceso.



El  procedimiento de D+E se centra en desarrollar la innovación desde el diseño, orientado hacia la solución de los retos fundamentales de crecimiento en un mundo dinámico. 
Al acercarse a cada uno de los aspectos de una organización con una mirada crítica y creativa se fomenta la evolución empresarial y el constante crecimiento.